lunes, 23 de noviembre de 2015

LO QUE ABORRECE JEHOVA

Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma: Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente, El corazón que maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr al mal, El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos. Proverbios 6:16-19

Primero: Los ojos altivos
Se refiere a quienes se mueven en un espíritu enaltecido, mirando a los demás con desprecio y se creen superiores a los demás, es algo con lo que hay que tener mucho cuidado porque para Dios todo somos iguales, El no hace excepción de personas.
También la palabra nos muestra que antes de la caída viene la altivez de espíritu, este texto se refiere a gente que creen que ellos mismos son y que no necesitan de nada, ni de nadie y es cuando viene la caída. La altivez de espíritu es lo que precede a la caída.

Segundo: La lengua mentirosa
Aquí habla del mentiroso, del que dice lo falso. La palabra de Dios nos dice que el diablo es el padre de mentira y que de la abundancia del corazón habla la boca, y si alguien es de lengua mentirosa es porque su corazón está lleno de mentira y falsedad y en su corazón hay tinieblas.
La palabra habla de que “nuestro si sea si y nuestro no sea no, porque lo que es más de esto, del mal procede“ y eso habla de esas personas que con sus medias verdades y sus palabras engañosas tratan de manipular a los demás.
No existen mentiras blancas ni piadosas, mentira es mentira y sólo hay una verdad. La gente tiene que ser de una sola cara y no caminar en falsedad, en engaños y mentiras de ningún tipo.

Tercero: Las manos que derraman sangre inocente
Aquí la palabra no sólo se refiere a una agresión violenta sobre otra persona sino también habla de la injusticia, y la injusticia viene del diablo y de las tinieblas. Existen espíritus que operan sobre la injusticia y Dios ve las injusticias en el hombre y aborrece ese tipo de cosas.
La palabra nos llama a juzgar de la manera correcta, sabia e íntegra. Esto también implica el perdón. Jesús fue a la cruz para que nosotros fuéramos perdonados, y ¿Por qué razón no podemos nosotros perdonar a los demás? y no sólo se refiere al hecho de perdonar o no, sino a juzgar, maltratar, dañar o castigar a alguien de manera injusta.
Nuestro Señor Jesucristo fue juzgado injustamente, y llevado a muerte y muerte de cruz de la manera más injusta, y muchos testificaron en su contra falsamente, y eso es ser parte de una injusticia y de derramar sangre inocente. Esto también incluye la corrupción y todo lo que tiene que ver con el pecado y la maldad del hombre.

Cuarto: El corazón que maquina pensamientos inicuos
El corazón de una persona no puede estar maquinando lo malo, la maldad y las cosas contrarias a la bondad de Dios ¿En que estas pensando?, Qué estas lucubrando? ¿En qué dedicas tu tiempo al momento de pensar? ¿Qué cosas planeas?. La palabra dice:”En esto pensad: en todo lo puro, lo bueno y agradable a Dios”…
Nuestro pensamiento tiene que ser analizado siempre. No puedes evitar que los pensamientos vengan a tu cabeza así como no puedes evitar que las aves vuelen sobre ella; pero sí puedes evitar que hagan un nido sobre tu cabeza. De igual forma puedes evitar que esos pensamientos que llegan a tu mente se aniden en tu corazón. Tú tienes decisión sobre ellos, puedes hablarles y reprenderles en el nombre de Jesús, llevándolos cautivos a la obediencia en Cristo Jesús.
En una ocasión Jesús hablaba de ir a la cruz, a lo que Pedro respondió, “que tal cosa no te acontezca”, Jesús le reprendió diciéndole:“apártate de mi Satanás”. Son muchas las personas que mal interpretan este texto.
Entendemos que Pedro quería lo bueno para Jesús, pero lo que sucedía era, que Pedro no estaba mirando la cosas de arriba, sino más bien estaba maquinando a beneficio propio del hombre, desenfocado del propósito Divino que se habría de cumplir a través de su sacrificio.
Hay pensamientos que vienen a ti que si tú no los desechas, por el contrario, los tomas y los absorbes, esto comienza a generar en tu vida una altivez de espíritu, y posteriormente a engañar y maquinar en contra de los demás. ¿Se pueden controlar los pensamientos? Claro que se puede, porque la palabra nos manda a pensar en todo lo bueno y todo lo recto, eso quiere de decir que tenemos autoridad sobre los pensamientos que vienen a nuestras vidas.

Quinto: Los pies presurosos para correr al mal
Esto se refiere a esa clase de gente que no tienen temor, ni se detienen a pensar para hacer el mal, simplemente lo hace de manera muy ligera en su vida, se mezclan con lo malo, en las malas conversaciones, y finalmente se dejan envolver del mal.
La palabra nos dice “que es mejor que perdamos un miembro de nuestro cuerpo, a que nos perdamos por completo”, y esto se refiere a que, aunque tengamos que cortar con cosas que son parte de nuestra vida, como un trabajo, amistades, familia, entre otras cosas, si nos son ocasión de caer, es mejor que cortemos con eso para que no se pierda todo nuestro cuerpo o se pierda la vida eterna.
Es necesario tener el carácter para decidir sobre nuestras acciones y aunque venga la tentación, el pecado y los deseos engañosos, fortalecidos en Dios podemos decirle no y resistirnos, porque así como viene la tentación, el Señor también te da la salida de ella.

Sexto: El testigo falso
En el momento que nuestro Señor Jesucristo fue enjuiciado, le buscaron falsos testigos y en otras ocasiones cuando juzgaban a Pedro también hubo falsos testigos. La gente comienza a emitir juicio acerca de otros de manera falsa, sin saber ni tener la seguridad de lo que dice, entonces se da a la tarea de murmurar al otro y a sembrar cizaña en lugar de unidad para manipular las situaciones a su antojo.
El testigo falso es un colateral hacia unos cuantos o hacia uno en particular, pero está enganchado a un propósito maligno de dañar a alguien para beneficiarse de ello y no le importan las almas, que es lo que Dios ama. Son personas que se venden y no son fieles a nadie ni a nada, solo a sus propios beneficios y conveniencia.
Cuando la palabra habla de que 6 cosas aborrece Dios y una séptima le es abominable, hay una séptima que Dios la toma muy en cuenta y está muy pendiente de ello. Esa séptima es algo que quizá parezca muy sencillo, algo que quizá no se vea tan grande, pero el Señor está pendiente de ello.

Séptimo: El que siembra discordia entre los hermanos
Esto trata sobre los que andan en un lleva y trae entre los hermanos, no solo de la iglesia, sino también entre los de sangre y la palabra dice que “los chismes separan hasta los mejores amigos”. Hay gente que vive de sembrar cizaña entre las demás personas y caminan en ese veneno y su función es traer daño y división y mutilan así el cuerpo de Cristo, la novia del cordero.
Lo que debemos procurar es la unidad en el Espíritu, y el vínculo perfecto de la paz es el amor. Porque más vale reprensión manifiesta que amor oculto, eso es lo correcto. Que no seas una persona de lengua mentirosa, que no seas un falso testigo, que no maquines pensamientos inicuos, que no seas de manos que derramen sangre inocente, ni de ojos altivos, debes tener el carácter de sentar a tu hermano y hablar!.
¿Qué estás hablando? ¿lo bueno o lo malo? ¿la bendición o la maldición? ¿la unidad o la división? Revisa qué estás hablando, porque para Dios eso es abominable.
Moisés fue elegido por Dios, y él tenía muchas debilidades y cosas en las cuales era una persona vulnerable, no era perfecto, pero Moisés era responsable de ese pueblo que Dios le entregó. Moisés cometió el error de que se casó con una mujer que no era del pueblo de Israel y él sabía que tenía que rendirle cuentas a Dios por ello, pero más allá de eso vinieron las críticas y las murmuraciones, y hasta sus propios hermanos de sangre María y Aarón le murmuraron. A María le cayó lepra, pero aún ellos habiendo hecho eso, Dios no permitió que sobre Aarón cayera lepra ni juicio, porque el mismo Dios respetó la unción que había en él. Por esta razón, hay que tener mucho cuidado de lo que sale de nuestra boca, porque eso acarrea juicio y maldición a la vida de quien incurre en estas cosas.

AQUILES AZAR

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