miércoles, 23 de diciembre de 2015

Dignidad y derechos idénticos - en la pareja


El hombre y la mujer, a los ojos de Dios, están a un mismo nivel. Ahora hay un
orden divino para la familia, pero el hombre y la mujer, marido y esposa, a los ojos
de Dios y ante los ojos de ambos, deben estar a un mismo nivel. El mismo
respeto, las mismas libertades y los mismos privilegios son para ambos. Ciertas
responsabilidades varían, pero la dignidad es absolutamente idéntica. Deseo
recalcar esta verdad, porque en nuestro continente, en toda la América Latina,
tenemos el concepto de que el hombre tiene ciertas libertades que a la mujer no
se le permiten. ¡No, señores, no! Digo de nuevo, ¡no! El hombre y la mujer tienen
los mismos privilegios, los mismos derechos y la misma dignidad. En otras
culturas, fuera del cristianismo bíblico o de su influencia fuerte, y en otras
religiones, se trata a la mujer como un ser inferior. Pero ella, según la Biblia, debe
compartir toda la responsabilidad, y ella tiene derecho a disfrutar de todo privilegio.
Lo interesante para la juventud es que sólo la Biblia, este hermoso libro inspirado por Dios, ha elevado el matrimonio al nivel sacrosanto.
Esto es lo que vino a hacer Cristo, cuando se hizo hombre, en la cruz murió por nosotros y derramo su sangre. Como lo dice en la Biblia: "El llevo nuestros pecados sobre su cuerpo en el
madero" (1 Pedro 2:24) ¿Para qué? Primero, para perdonar los pecados y levantar
al individuo, a mi ya ti, "a todo aquel que cree" (Juan 3:16) .Pero Cristo murió, no
solo para salvar al individuo, sino también para elevar a la familia, elevar el
matrimonio, elevar a la nación. Dios ama a las personas. A todas las personas, en
todas sus situaciones. Dios eleva, levanta, completa al individuo y a su familia.
Joven, adelante en tu búsqueda del novio y la novia que un día será tu esposo o tu
esposa, pero adelante con Cristo. Con Cristo hay esperanza de un futuro feliz,

CON QUIEN ME CASARE -Luis Palau - Pag 28 del PDF

No hay comentarios:

Publicar un comentario